Vivimos en una era donde la publicidad, las redes sociales y las compras en línea están al alcance de un clic. Las ofertas, promociones y notificaciones constantes pueden hacernos pensar que necesitamos algo… aunque en realidad no lo necesitemos. Y aunque muchos disfrutamos de comprar de vez en cuando, hay quienes no pueden parar. Esa necesidad compulsiva de comprar tiene nombre: oniomanía.
En este blog te contaremos qué es la oniomanía, cómo detectarla, cómo tratarla y, si ya te ha causado problemas financieros, cómo puedes empezar a recuperar tu estabilidad.
La oniomanía, también conocida como trastorno de compras compulsivas, es una condición psicológica caracterizada por la necesidad incontrolable de comprar, sin que exista una verdadera necesidad detrás de la adquisición. A menudo, quienes la padecen sienten un alivio temporal al comprar, pero luego experimentan sentimientos de culpa, ansiedad o remordimiento.
Este trastorno no se trata simplemente de gustar de las compras o aprovechar ofertas ocasionales. Va mucho más allá: se convierte en un impulso difícil de controlar que puede interferir en las relaciones personales, la salud emocional y, por supuesto, en la salud financiera.
Algunos signos de alerta que pueden indicar que tú o alguien cercano padece oniomanía son:
Este comportamiento, aunque parezca inofensivo, puede afectar profundamente la calidad de vida de quien lo padece. Las deudas, las discusiones familiares, la baja autoestima y la pérdida de control pueden ser consecuencias graves.
La compra compulsiva puede tener distintos orígenes. Algunos de los más comunes son:
Afortunadamente, la oniomanía tiene tratamiento. Lo más importante es reconocer el problema y estar dispuesto a buscar ayuda. Aquí te compartimos algunos pasos clave:
Puede parecer obvio, pero muchas personas con oniomanía no se dan cuenta o lo minimizan. Reconocerlo es el primer paso hacia el cambio.
Un psicólogo o terapeuta especializado puede ayudarte a identificar las causas emocionales del trastorno y trabajar en estrategias para manejarlo.
Escribir todo lo que compras y cuánto gastas te ayuda a tomar conciencia de tus hábitos. También te permitirá ver patrones y evitar futuras compras innecesarias.
Establecer límites de gasto y apegarte a ellos es esencial para retomar el control. También puedes destinar una cantidad específica para «gustitos», pero sin rebasar tu capacidad.
Elimina notificaciones de apps de compras, cancela suscripciones a newsletters de ofertas y evita ir al centro comercial sin un objetivo claro.
Cuando sientas la necesidad de comprar, intenta sustituirla con actividades que también generen bienestar, como hacer ejercicio, leer, salir a caminar o practicar un hobby.
Si la oniomanía ya ha causado un desbalance en tus finanzas, no estás solo. Muchas personas han atravesado situaciones similares y han salido adelante. Una forma de comenzar a retomar el control es ordenar tus finanzas, consolidar tus deudas y crear un plan de pago responsable.
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