Ahorrar suena sencillo en teoría: guardar una parte de tus ingresos regularmente para cumplir una meta. Pero en la práctica, muchos se enfrentan con obstáculos que impiden lograrlo. Ya sea por malos hábitos, falta de planeación o decisiones emocionales, es común que el dinero que deberíamos guardar… simplemente desaparezca.
En este blog te contamos cuáles son los errores más comunes que sabotean tus ahorros y, lo más importante, cómo solucionarlos para que finalmente logres tus metas financieras.
El error:
Muchas personas ahorran “porque sí”, sin un objetivo definido. Y cuando surge cualquier imprevisto o antojo, ese dinero “sin propósito” desaparece.
La solución:
Define tu meta de ahorro. ¿Quieres irte de viaje? ¿Comprar una laptop? ¿Tener un fondo de emergencias? Saber para qué estás ahorrando te da motivación, enfoque y una razón poderosa para no gastar lo ahorrado.
Consejo: Escríbelo y ponlo en un lugar visible. Ver tu meta te ayudará a mantener el compromiso.
El error:
“No sé en qué se me va el dinero”. Esta frase es más común de lo que debería. Y es una señal clara de que no estás haciendo un seguimiento de tus gastos.
La solución:
Lleva un registro diario o semanal de tus gastos. Puedes usar apps como Fintonic, Wallet, Spendee o simplemente una hoja de Excel. Ver en qué gastas te ayuda a identificar fugas de dinero y hacer ajustes.
Consejo: No necesitas hacerlo perfecto, pero sí constante. Lo importante es tener claridad.
El error:
Si gastas todo lo que ganas (o más), el ahorro simplemente no será posible. Muchas veces este problema viene de querer mantener un estilo de vida por encima de nuestras posibilidades.
La solución:
Haz un presupuesto mensual realista. Establece un límite claro para tus gastos fijos, variables y, por supuesto, tu ahorro. La clave está en “pagarte primero”, es decir, separar el ahorro antes de gastar el resto.
Consejo: Empieza ahorrando el 10% de tus ingresos. Si no puedes tanto, empieza con menos. Pero hazlo cada mes.
El error:
Usar tus ahorros para emergencias inesperadas (como enfermedades, reparaciones del auto o desempleo) es un error común, pero comprensible.
La solución:
Crea un fondo de emergencia independiente de tus otros objetivos de ahorro. Lo ideal es que cubra de 3 a 6 meses de tus gastos básicos.
Consejo: Guárdalo en una cuenta de fácil acceso, pero no tan accesible como para tentarte a usarlo sin necesidad.
El error:
Esperar a “ver si te sobra” al final del mes para ahorrar. Spoiler: casi nunca sobra.
La solución:
Automatiza tus ahorros. Programa una transferencia automática justo el día que recibes tu salario. Así te aseguras de que el ahorro se realiza sin depender de tu fuerza de voluntad.
Consejo: Trata tu ahorro como un gasto fijo, igual que el pago del internet o la renta.
El error:
El “me lo merezco”, “estaba en oferta” o “solo por hoy” son enemigos del ahorro. Las compras impulsivas desvían tu dinero y dificultan alcanzar tus metas.
La solución:
Aplica la regla de las 24 horas. Si ves algo que quieres comprar, espera un día antes de decidir. En la mayoría de los casos, la emoción baja y puedes pensar con claridad.
Consejo: Haz una lista antes de ir al supermercado o al centro comercial, y cúmplela. Nada fuera del plan.
El error:
Guardar tu dinero debajo del colchón o en una cuenta sin rendimientos te hace perder valor con el tiempo por culpa de la inflación.
La solución:
Una vez que tengas una base de ahorro, evalúa invertir en opciones seguras como CETES, cuentas de ahorro con rendimiento o fondos de inversión básicos. Hay opciones accesibles desde $100 pesos.
Consejo: Infórmate bien y empieza poco a poco. No necesitas ser experto para empezar.
El error:
Intentar llevar el mismo estilo de vida que tus amigos, vecinos o influencers puede llevarte a gastar de más.
La solución:
Recuerda que tus metas son tuyas. Enfócate en lo que tú necesitas y puedes lograr. La comparación solo genera ansiedad y decisiones financieras poco saludables.
Consejo: Rodéate de personas que compartan tus objetivos o respalden tus decisiones de ahorro.
Ahorrar no es cuestión de magia ni de tener un sueldo enorme. Es disciplina, conciencia y decisiones inteligentes. Todos cometemos errores, lo importante es identificarlos y hacer los ajustes necesarios.
Si tu meta de ahorro se ha visto afectada por un imprevisto o necesitas un impulso económico para arrancar un nuevo proyecto, recuerda que en Intermercado te ofrecemos créditos rápidos, accesibles y a tu medida.
Solicita tu crédito hoy mismo y no dejes que un obstáculo detenga tus planes.